Lo bueno se toma su tiempo. Te contamos por qué nuestro queso Parmesano es una joya de sabor y te invitamos a escanear su packaging para ver, paso a paso, el proceso que lo hace Naturalmente Rico.
¡Hola, amantes del sabor intenso y de las historias que vale la pena contar!
Hoy queremos hablarles de un verdadero orgullo de la casa, una estrella que brilla por su paciencia y calidad: nuestro Queso Parmesano con 18 meses de maduración.
Para nosotros, el Parmesano no es solo un queso para rallar; es una experiencia que empieza mucho antes de llegar a tu cocina. Y por eso, decidimos que esta joya se merecía un packaging que no solo lo proteja, sino que también cuente su verdad.

El Sabor de la Paciencia: 18 Meses de Espera
En RICOLACT sabemos que la prisa es enemiga de la calidad. Nuestro Parmesano pasa un año y medio (¡18 meses!) bajo un cuidado casi obsesivo.
¿Qué pasa durante ese tiempo?
- Las hormas reposan en condiciones estrictas y controladas de temperatura y humedad, donde nuestros maestros queseros las cuidan y rotan.
- El sabor se intensifica, se concentra, y la textura se vuelve la característica granular y cristalina que tanto amamos.
- El resultado es un queso de sabor potente, con ese toque umami que lo hace perfecto para rallar, laminar o incluso comer a trocitos como aperitivo.


¡Escaneá y Mirá! La Transparencia en tu Mesa
Dentro de nuestra tradición quesera, numeramos cada horma para hacer su seguimiento independiente, y dicho número hoy se encuentra en el estuche que lo protege. Junto a su número, van a encontrar un nuevo código QR donde ponemos el proceso de elaboración en la palma de tu mano.
Solo tenés que acercar tu teléfono, escanearlo, y ¡listo! Serás redirigido a un video en nuestra cuenta de Instagram. Ahí te mostramos el corazón de RICOLACT:
- Paso a Paso: Desde la leche fresca hasta el envasado final.
- Transparencia Total: Queremos que veas con tus propios ojos el cuidado, la dedicación y el tiempo que invertimos en cada una de estas hormas.
Este QR es nuestro compromiso con vos: calidad que no solo se siente, sino que también se puede ver. ¡Gracias por seguir eligiendo el sabor, la calidad y la paciencia de RICOLACT!